El Dominio Privado. Manuel Gausa y Jaime Salazar.


EL DOMINIO PRIVADO de Manuel Gausa y Jaime Salazar. Actor D, 1999.

Apuntes aislados y reflexiones.

SINGULAR HOUSING, EL DOMINIO PRIVADO.

Podríamos “clasificar” a la arquitectura en tres capas físicamente definibles, a través de esferas, es decir, calidades de cercanía o lejanía con respecto a nuestros cuerpos de acuerdo  al desplazamiento desde la atención sobre la casa como objeto hacia la progresiva asimilación o disolución del proyecto en los contextos en los que tiene lugar la arquitectura.

Consideraremos las tres capas como tres contextos diferentes: ENDO, EXO NEAR Y EXO FAR. Donde cada uno va de menor a mayor disolución, con una condición cada vez menos objetual en relación con los contextos de la información, la tecnología y el paisaje.

ENDO

ENDO: LA CASA COMO INTERFAZ

“El ser digital tiene 3 efectos fisiológicos en la configuración de nuestro mundo: descentraliza, allana y hace que las cosas sean más grandes y más pequeñas al mismo tiempo. Como los bits no tienen tamaño, forma ni color, tendemos a no considerarlos de manera morfológica. Pero al igual que los ascensores han cambiado la configuración de los edificios y los automóviles han cambiado la forma de las ciudades, los bits cambiarán la configuración de las organizaciones, sean estas compañías, naciones o estructuras sociales”.  Nicholas Negroponte.

“A diferencia de los cambios ambientales anteriores, los medios electrónicos constituyen una transformación total e instantánea de la cultura, los valores y las actitudes. Este trastorno genera mucho dolor y pérdida de identidad, que puede mejorarse únicamente a través de una concienciación de su dinámica. Si entendemos las transformaciones revolucionarias causadas por los nuevos medios, podemos anticiparlos y controlarlos, pero si continuamos con nuestro trance subliminal autoinducido nos convertiremos en sus esclavos”.  Marshal McLuhan.

EL CONTEXTO “ENDO” Y LA CASA

«(…) En primer lugar para los arquitectos, su apreciación de la arquitectura es sobre todo, una historia de modelos. Modelos de ideas, nombres y objetos, maestros y edificios, que intentan emular o recrear, realizándose a través de ellos en sus obras. Incluso hoy en día o mejor dicho, hoy en día más que nunca, el consumo por parte de los arquitectos de una determinada producción de elite a través de los medios de comunicación ha convertido también a la arquitectura en una gran industria cultural: un dato más que añadir a esa progresiva “transformación informativa” inherente a cualquier empresa material, de la que la arquitectura no podía ser un caso aparte.»

“El debate y la producción de arquitectura ignoran al usuario. Arquitectura es una categoría que, afortunadamente, se prolonga mucho más allá de la tarea de los arquitectos, los cuales son sólo un pequeño sector que produce objetos”.

“Arquitecto y habitante, ambos crean eso que se llama arquitectura, uno a través del diseño, el otro a través del uso”.  Jonathan Hill

“La reciente importancia que se le da al ego arquitectónico podría hacernos olvidar que el arquitecto es también un actor social”.  Yves Lion

Determinados contextos de la realidad son abarcables, asimilables desde la labor de los arquitectos. ¿Es posible, entonces, imaginar que la era de la información puede “acercar” al arquitecto a contextos que desde su acción jamás había considerado acercables?  ¿Es posible imaginar que, en el proyecto de la vivienda unifamiliar, las “esferas” en las que se mueve el arquitecto y el habitante no son tan antagónicas?  ¿Es posible imaginar una forma de producción arquitectónica que “interactúe” con la realidad mucho más de lo que ha podido hacerlo nunca hasta ahora?»

“Se ha producido una fractura morfológica en el campo dimensional. Este problema de la disminución del tiempo ha puesto, una vez más, en tela de juicio nuestro concepto de un mundo sin dimensiones completas, que hasta ahora informaban la creación de la arquitectura. A partir de ahora, el arquitecto necesita trabajar en dimensiones fraccionadas”.   Paul Virillo

LA INFORMACIÓN Y LA FORMA

Los contextos –físicos o abstractos- definen la manera de hacer arquitecturas… contextos sociales, contexto legal, contexto material, contexto físico.

Gran parte de la información sobre dichos contextos ha sido elaborada siempre desde la subjetividad del autos. De ahí su incomprensión social y su banalidad, por la escasa “interactividad” que tiene su acción.

La creciente era de la información ha producido un cambio significativo en la producción arquitectónica. Los contextos generan información procesable y codificable, que puede generar forma. Y generando forma genera información paralela – una segunda abstracción informática – que se superpone a la primera abstracción de la modernidad.

No es una revolución de la forma arquitectónica como pudieron serlo las vanguardias modernas. No es sólo una revolución formal, aunque también tenga grandes consecuencias, es un cambio de fondo – una dimensión crítica, ética, poética diferente – de la acción de hacer arquitectura.

LA INTERACTIVIDAD

Se refiere a la sustancia informativa inherente a los procesos – codificable, mesurable, manipulable – con que cada vez más operamos nuestro presente.  Que permite la relación más fluida entre culturas materiales.

“Estamos experimentando una liquidez extrema del mundo, de nuestro lenguaje, de nuestro género, de nuestros cuerpos: una situación en la que todo se mediatiza, donde toda materia y espacio se fusiona con sus representaciones en los medios, donde toda forma se fusiona con la información. Estamos pasando de la materia a la sustancia, de la solidez al grano y la resolución“. Lars Spuybroek.

LA CASA COMO PROYECTO INTERACTIVO

Arquitecto, usuario, constructor, todos manejan información que se relaciona a través de la interfaz proyecto. Entendemos la información en el sentido más amplio posible. Pero,  (ésta es la novedad), esa información puede ser remitida, por primera vez, a pautas comunes. A través de la gestión actual de la información, las relaciones y los cometidos –hasta ahora sólidamente definidos—se diluyen. Las relaciones se disuelven. Al existir un trasfondo de gestión informativa común a todas las partes, el proyecto no puede seguir siendo una dinámica de decisiones cerradas, sino que se ha convertido en un proceso de negociación y propuesta que ya no tiene, como antes, invariantes previas.

“Tiene lugar una transición desde sistemas cerrados, definidos por la decisión y completos, a sistemas abiertos, no definidos e incompletos; desde el mundo de la necesidad a un mundo de variables manipuladas por el observador, desde la monoperspectiva a la perspectiva múltiple, desde la hegemonía al pluralismo, del texto al contexto, de la localidad a la no localidad, de la totalidad a lo particular, de la objetividad a la realidad del observador, de la autonomía a la covariación, de la dictadura de la subjetividad al mundo inmanente de la máquina.¨ Peter Weibel.

El arquitecto diseña y el constructor construye, pero ambos interactúan a través de la información común. Presupuestos, catálogos, etcétera…. Las formas de expresión multimedia, las dinámicas de mercado de la vivienda, el consumo cultural, la publicidad, otras dinámicas informativas, narrativas o de consumo se afectan mutuamente y por tanto afectan la acción material de los arquitectos.

LA INFORMACIÓN, EL HABITANTE Y EL ARQUITECTO.

Para lo bueno y para lo malo, la era de la información es, a su vez, la era de la interactividad, de la disolución de las culturas estancas en una condición informática global.

La informatización introduce un cambio de fondo, más que de forma en la manera de hacer arquitecturas.

“Ya no existe un canon vinculante de valores, los tabúes del modernismo y del antimodernismo se han roto y cualquier cosa es posible. Se podría llamar a esto una “Disneysificación” total, un cambio constante entre ambientes, que en sí mismos son armónicos, pero con una diferencia formal externa entre ellos, y la aceptación constante por parte de un público que, debido a su “mediatización” completa, es capaz de ir de la mano de dichos enormes saltos culturales.” Dietmar Steiner.

La verdadera transformación consiste en que la informatización del proceso de hacer arquitecturas no supone la deshumanización final del arte de construir. Más bien al contrario. Mantener una actitud canónicamente moderna respecto a la arquitectura conduce a la marginación del arquitecto como actor social. De nuevo, el arquitecto se ve empujado a reconsiderar su acción. A encontrar una nueva autoría, renovada, en un contexto que se renueva continuamente. La nueva dimensión crítica, artística y material de la era de la información.

«La casa está pasando de la condición de “modelo” a la de norma, siendo la norma una fórmula indefinida y manipulable en la intersección de líneas de producción y deseo, una fabricación mucho más flexible y fluida de un modelo finito. Dicha tendencia, tal como nació de la fusión de tecnología y capital, parece marcar una dispersión efectiva del ego de la arquitectura moderna, y permite que se empiece a imaginar una tendencia cultural alternativa, una sicología diferente de “casa”. Decoi Architects.

CASA – CAJA  OBJETO RETROACTIVO O MECANISMO REACTIVO.

Tópicos: tres tópicos que todo mundo se imagina cuando se habla de vivienda unifamiliar.

1) La casa con cubierta de 2 aguas, teja, barandilla de balastras, chimenea de piedra, balcones de cuarterones y faldones dorados. Las apetencias más extendidas de una clase media que “habría convertido sus afanes en un elemental y abstracto sistema de ideologías”: sería esta la radiografía según la estadística de la casa de nuestros sueños, el patrón más arraigado de nuestras íntimas apetencias (la nostalgia de lo rural, la caricatura del bienestar, la evocación de la atemporal)

2) El interior doméstico, la ambigua escenografía: el sillón orejero, la lámpara de pantalla (en pergamino) y la araña veneciana, los visillos (de encaje) y las cortinas (de volantes), las alfombras persas y los objetos de porcelana, los cuadros (de paisajes) mezclados con los “viejos – nuevos” artefactos electrónicos convertidos en muebles (tv, video, etc) un repertorio kistch que transmitiría una comercializada sensación multicultural de hogar.

3) El jardín: el enano de jardín, los monitos cerámicos y las cenefas y todas esas cosas que evidencian el éxito de la nostalgia y lo sentimental.

Transportando contextos y culturas estos 3 tópicos que significan la idea universal de casa. Son el icono más extendido del espacio doméstico por excelencia: familiar, atávico, placentero y algo infantil.

George Rizten en su libro “La mcdonaldización de la sociedad” dice: “El éxito del producto Mcdonald’s fue saber dar en su momento, un paso más en la organización científica de la producción en cadena (taylorista y fordiana) incorporando a la industria de la producción de objetos a la producción de apetencia – la comida como primer ensayo pero también, posteriormente, la escenificación del consumo (malls y centros comerciales), del ocio (viajes organizados), del espectáculo (hollywoodlandia), de la cultura envasada (“enciclopedismo”) y, por fin, de la vivienda como producto estandarizado –. En todos los casos, el acierto radica en saber fundir tras un concepto de gran consenso (la noción de “producto garantizado”) cuatro preestablecidos y fácilmente asumibles: el factor eficacia (apariencia de mayor organización y rapidez en la producción), el factor cálculo (apariencia de mayor economía) el factor predicción (apariencia de mayor previsibilidad) y el factor control (apariencia de mayor seguridad). Eficacia, economía, previsibilidad y control son pues, los patrones básicos del efecto Mcdonald’s a los que habría que añadir un último factor (el de la teatralidad incorporada o entertainment) facilitada por todo un universo de gadget incorporados al producto”.

Quizá Disney fue quien saca más provecho, pero la vivienda unifamiliar es donde las consecuencias han sido más devastadoras.

EXO NEAR

EXO NEAR: LA CASA COMO ARTEFACTO

En este capítulo entra en consideración un segundo entorno del proyecto de la vivienda unifamiliar: la dimensión próxima a nuestros cuerpos. A diferencia del anterior, esta capa pertenece ya a una dimensión exterior, exopidérmica, más allá de nuestra piel.

EL CONTEXTO ´´EXO´´  CERCANO

Dejamos atrás la dimensión interior –las esferas de la ilusión, del consumo, del diseño de la información— para enfrentar el ámbito de las relaciones del cuerpo en el espacio.

El contexto “EXO” cercano. Las relaciones del cuerpo en el espacio. Como si el entrono interior de nuestras viviendas fuera la piel próxima a nuestra propia piel, como la ropa que nos ponemos, que cambia de acuerdo a nuestras necesidades.

Este capítulo tiene interés en 2 aspectos: el interior de las viviendas como una implementación tecnológica y que 2º lugar como una implementación espacial, material, construida.

EL ENTORNO CERCANO DE LA TECNOLOGÍA

Cualquier mecanismo que ronda a nuestros cuerpos para asistirnos en una determinada manera entra dentro del ámbito de esta 2ª capa protésica exacorporal.

“Cada vez más parece que las máquinas son una forma de ser humano, no una entidad separada; y de igual forma que un ser humano es sin duda alguna  forma de máquina”.   Maurice Dantec

Nuestra sensación de confort depende en una gran parte de nuestra dependencia respecto de las máquinas que nos facilitan las acciones del hogar, que nos permiten llevar a cabo una vida supuestamente más cómoda y relajada. El problema es hasta dónde llega la dependencia.

“Al abrazar continuamente tecnologías, nos relacionamos con ellas como servomáquinas. Es por esto por lo que debemos, para utilizarlas servir estos objetos, estas extensiones de nosotros mismos, como dioses o religiones menores. Un indio es un servomecanismo de su canoa, como el vaquero lo es de su caballo o como el ejecutivo lo es de su teléfono móvil.” Marshal Mcluhan.

EL ENTORNO CERCANO DE LA CONSTRUCCIÓN

“La arquitectura no puede limitarse a “extender” el cuerpo, sino que debe ser suplemento activo y funcional, un mecanismo autónomo y receptivo a un tiempo, “extraño” y a la vez sensible a lo particular, capaz de regirse por sí mismo y al mismo tiempo sostener y potenciar al anfitrión”. Manuel Gausa.

LAS OPCIONES CERCANAS DE LA INDUSTRIA. EL PROYECTO ACABADO, LA PREFABRICACIÓN O LA SOLUCIÓN LOCAL.

“Mientras que el diseño automovilístico y el diseño industrial persiguen un estilo moderno que dé respuesta a las necesidades en boga de los consumidores, el diseño de la vivienda se orienta estrechamente hacia el conservadurismo, si bien éste es también superficial”  Toyo Ito.

“Una vivienda diseñada como un automóvil es un inconveniente, ya que las piezas estarían tan estrechamente integradas en el concepto de estructura-espacio que cambiar de refrigerador sería como querer tener una guantera más grande en un volskwagen. Es mejor adquirir un nuevo coche.” A+P Smithson

EXO NEAR

EXO FAR LA CASA COMO PAISAJE

Introducimos, por último, un tercer contexto. Una tercera capa. Una capa más lejana que nuestro cuerpo, más externa a nuestra relación próxima con los mecanismos que, cercanos a nosotros, implentan nuestros entornos de habitar. Se trata de una capa exoepidérmica lejana, destinada a describir la relación de la casa como objeto construido respecto al medio en que se ubica.

En los dos casos anteriores hemos venido considerando que la paulatina transformación de los procesos y las empresas de producción de objetos de la era mecánica o industrial hasta la era electrónica o de la información provoca, a su vez, una transformación de nuestra manera de “percibir”: desde la percepción solamente visual, pasiva o escasamente interactiva respecto al objeto –característica de la arquitectura moderna– hasta una interacción cada vez mayor, que determina nuevo presente.

Esta interacción cada vez mayor del sujeto respecto al objeto construido no sólo es física, como se describía en la segunda etapa (exo-corporal cercana), sino que también tiene que ver con los flujos de información que cada vez más crecientemente definen las relaciones en la producción de objetos (capa primera o endo-corporal).

EL CONTEXTO “EXO” LEJANO

Tiene que ver más con la interacción de la casa como objeto construido en el paisaje. La relación del proyecto con el medio en que se ubica, considerando que la arquitectura cada vez más tiende a “disolverse” en su entorno, que denominamos “paisaje”.

Nuestra concepción de la arquitectura se basa, sobre todo, en objetos. La historia de la arquitectura moderna es, fundamentalmente, una historia sobre objetos y sobre autores. Nuestra asimilación de la arquitectura actual, convertida en una industria de consumo, también lo es. Pero la progresiva transformación desde la industrialización a la informatización de los procesos materiales ha inducido un cambio significativo en las empresas de creación de objetos. En la producción artística o mediática, en general, y en la arquitectura, en particular: el progresivo desplazamiento desde la fijación en los objetos hacia la asimilación de los contextos.

Cada vez más, lo que una vez habían sido objetos cerrados por la decisión de un único actor se abren hoy a un contexto menos lineal, más abierto, indefinido, influenciable y, sobre todo, identificable por primera vez mediante la gestión de información.

En nuestra era informática, la autonomía de la disciplina ha perdido absolutamente su sentido. Lo objetual se “disuelve” cada vez más en lo contextual, no por decisión personal del arquitecto como actor único, sino porque, por primera vez, lo “externo” a una acción tiene una posible transcripción informativa. Si la información puede ser transcrita como forma, si la arquitectura puede ser –en parte—un proceso de gestión informativa, ¿se pueden abarcar dimensiones y contextos hasta ahora difícilmente asumidos por el arquitecto?

¿En lugar de distanciarse, puede la arquitectura, desde esa dimensión informativa, asumir como factores posibles de proyecto la interacción con el público o con la realidad?. Y, por otra parte, si así fuera, ¿Qué le queda de arquitectónico, de obra de autor, a la producción de la arquitectura? ¿Quiere eso decir que la acción del arquitecto pierde su sentido como obra, o incluso como servicio?

De la misma manera que la irrupción de la modernidad industrial del siglo XX potenció la acción del arquitecto transformándola y regenerándola, así también nuestra actualidad informática posterior a la modernidad supone una progresiva transformación de los significados y de los resultados materiales de la arquitectura.

EL PROYECTO DE LA VIVIENDA FRENTE A LA REALIDAD: DISOLUCIONES.

DISOLUCIONES PERCEPTIVAS: El cambio en torno a la arquitectura de la era informática no es sólo de carácter perceptivo. La forma no va destinada a una nueva dimensión perceptiva (como podía serlo la promenade architecturale propia de la modernidad), sino a un cambio en la relación entre el arquitecto y el perceptor en cuanto a la posibilidad que tiene éste de ”actuar” e influir mucho más decisivamente sobre el medio en el que se desarrolla el proyecto arquitectónico. La percepción de la era informática es la interacción.

DISOLUCIONES ESTILÍSTICAS: comprender el proyecto contemporáneo como una acción tendente a una mayor interacción entre la realidad y el arquitecto abre nuevas posibilidades de propuesta. En esta nueva realidad no son posibles las invariables de estilo que caracterizan una acción propositiva convencional. Todo proyecto surge de la más atenta y directa “captación de datos” de una situación específica, lo cual pone en tela de juicio cualquier invariable estilística personal previa –por muy innovadora que esta sea— de proyecto.

DISOLUCIONES PROGRAMÁTICAS: el sampling espacial. La funcionalidad de la era electrónica, a diferencia de la funcionalidad moderna, tiene que ver con la acción. La forma sigue a la acción, ya no a la función. Forma y función ya no tienen relación alguna, lo tienen en cambio, y cada vez más, la forma y la información. Por lo tanto, la disolución programática del espacio –su indefinición, su definición según programas híbridos o “sampleados” (casa-oficina, casa-garaje, casa-ciudad)—es un fenómeno inherente a una comprensión del proyecto de arquitectura residencial en la era electrónica.

DISOLUCIONES TECNOLÓGICAS (O DEL ENTORNO TECNOLÓGICO): los entornos construidos contemporáneos se ven sometidos a una transformación similar a la que tiene lugar en nuestros cuerpos. La implementación tecnológica es cada vez más nanotecnológica. De los “grumos” de tecnología que asisten actualmente nuestros hogares fluímos hacia entornos cada vez más isótropos cargados de tecnología en información.

DISOLUCIONES DE LA FORMA: el proyecto de arquitectura es un determinado “mensaje” físico sobre el “medio” de la realidad. Por lo tanto, si se transforma el medio se transforma a su vez el mensaje. El proyecto contemporáneo se desarrolla según unas de pautas que desdibujan, disuelven, la relación objetual de la arquitectura con el medio, la relación de figura y fondo. La arquitectura no tiene sentido como objeto diferencial sino como mecanismo operativo que plasma o persigue una determinada estrategia de adecuación al medio real.